El mejor regalo para tu entrenador

Si tu entrenador se entrega cada día, prepara con minuciosidad los entrenamientos, para que tengas la mejor preparación posible en tus competiciones. Estos son algunos de los mejores regalos que tú le puedes hacer a tu entrenador:

- Tu constancia y la lucha por querer bajar esa marca que se te está resistiendo.
- Tu asistencia a los entrenamientos.
- Tu asistencia a las competiciones.
- Tu insistencia en querer mejorar ese viraje, que se te resiste.
- Tus metas y tus sueños.
- Tus sudores en los entrenamientos.
- Tu voluntad y la perseverancia para superarte a ti mismo, una y mil veces.
- Tu responsabilidad como nadador/a.

Todo esto no cuesta nada económicamente y se recuerda toda la vida.

¿Cómo nos adaptamos al esfuerzo?

Indudablemente, si nos esforzamos durante el ejercicio, notamos cambios en nuestro cuerpo y consecuentemente se producen adaptaciones en los músculos (ácido láctico), corazón (aumento de la cantidad de sangre que el corazón puede impulsar por minuto en cada latido y descenso de la frecuencia cardíaca), respiración, pulmones, sistema nervioso. A medida que vamos entrenando somos más capaces de responder a nuevas formas de ejercicios durante nuestro entrenamiento,, nos cansamos menos.
Pues bien, todas estas adaptaciones se ven mermadas por lo siguiente:
Si no nos esforzamos lo suficiente durante el entrenamiento.
Si no le dedicamos el tiempo necesario a entrenar.
Si no tenemos suficiente descanso (de 7 a 8 horas).
Si nuestra dieta no es la adecuada.
Si no asistimos con regularidad a los entrenamientos.

No conseguiremos la mejora que sería deseable.

Las faltas de asistencia a los entrenamientos

Las faltas de asistencia a los entrenamientos es un mal con el que tenemos que convivir habitualmente los entrenadores de natación. Nosotros sabemos que si el nadador no se entrena lo suficiente, las consecuencias son nefastas para su rendimiento y para el programa que el entrenador prepara a lo largo de la temporada y que va ajustando semana a semana, todo se va al traste, si se producen las ausencias sistemáticas de nadadores/as a los entrenamientos. Esto se convierte en un cáncer difícil de erradicar si las ausencias son una costumbre, entonces el entrenamiento se convierte en un ambiente desganado para estos nadadores, faltos de motivación, porque sus compañeros que asisten si han avanzado y cuando se dan cuenta que no avanzan el camino del abandono está muy cerca.
Lo que hay que aplicar en estos casos es apelar a su responsabilidad con el Club a la responsabilidad de sus padres. Es conveniente hablar con el nadador/a y corregir en lo posible esta situación, convencer al nadador para que asista a las sesiones de entrenamientos y no falte. Si esto no es posible lo mejor para el nadador y para el Club es que lo deje y que se enfrasque en otro programa de mantenimiento o de recreo, pero no en un programa de entrenamiento de natación cuyas exigencias no le permiten asistir cuando el quiera.
El Club que tiene la mala fortuna de tener una asistencia de sus nadadores negativa está condenado al fracaso.

Yo quiero conseguir una marca mínima ...

Probablemente tú no conseguirás hacer una marca mínima para acudir a un Campeonato, hasta que no seas consciente de lo que esto supone, por ejemplo:

- Prepararse físicamente y mentalmente.
- Esforzarse en cada día de entrenamiento.
- Ten presente esa marca en tu cabeza.
- Ve dando pasitos y arañando segundos al crono.
- Ilusiónate cada día.
- Si tanto te ilusiona esa meta, pon todos los medios a tu alcance para conseguirla (asistencia a los entrenamientos, concentración, esfuerzo).
- Repite esa serie que se te resiste hasta que consigas el objetivo.
- Repite, perfecciona tu estilo lo que sea necesario hasta que salga perfecto.
- Haz caso a tu entrenador en lo que te dice cada día.

De esta forma sí será posible conseguirlo, no tienes nada que perder y sí mucho que ganar.

Por el contrario, hay otros nadadores que quieren ir a un Campeonato importante, claro y a quién no le gusta, pero faltan a los entrenamientos, no ponen los medios necesarios y el esfuerzo que esto conlleva para conseguirlo. Esto es engañarse a sí mismos y sólo vale para ser un nadador mediocre y perder tu tiempo y el del entrenador.

¿Tú que eliges?